Desde las afueras de la Defensoría del Pueblo, familiares, sindicatos y abogados; exigieron la libertad de los seis dirigentes sincales nacionales detenidos arbitrariamente por el Estado.
La esposa del profesor Alcides Bracho, Yorbelis de Bracho; indicó que el dirigente sindical fue detenido de manera arbitraria el paso 4 de julio; dentro de su hogar en presencia de sus hijos y sobrinos.
«A mi casa entraron más de 10 efectivos de seguridad con armas largas; revisaron toda mi casa y se lo llevaron sin motivo alguno»; denunció la esposa.
El profesor Bracho se encuentra en estos momentos recluido en zona siete, Boleíta; fue presentado en tribunales y le imputaron dos cargos, conspiración y asociación para delinquir.
Al respecto, Yorbelis de Bracho dijo que no ha podido ver a su esposo; y se encuentra en buenas condiciones físicas.
«Está bien en lo que cabe, lo he podido ver; pero está en condiciones no aptas para el ser humano. Protestar no es un delito», puntualizó.
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Por su parte, el abogado Eduardo Torres, exigió al Estado venezolano que escuche el clamor de los trabajadores; que están siendo perseguidos y hostigados por defender sus derechos.
«Hay seis ciudadanos detenidos arbitrariamente y todos tienen en común; que han defendido sus derechos laborales», indicó Torres.
El abogado dijo que seguirán en las calles exigiendo salarios justos; el respeto a las contrataciones «y todos los derechos para los trabajadores».
Recordemos que el próximo 21 de julio; habrá una gran movilización de los trabajadores, obreros, sindicatos y jubilados hacia Miraflores, para exigir mejores condiciones.
