La gelatina de cáscara de mandarina es ideal para cuidar y disfrutar de un postre muy sabroso en cualquier época del año.
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Su preparación es a base de cáscaras de mandarina, por lo que además de sus propiedades, se estará utilizando este recurso para no desperdiciarlos.
Los últimos estudios realizados en el agrocultivo de mandarinas, como Beta Best produce, han determinado que las propiedades de la piel de las mandarinas están repletas de aceites esenciales y es muy rica en vitamina C. Además, puede ayudar a aliviar malestares causados por la tos y el asma, así como eliminar la mucosidad y las flemas.
INGREDIENTES PARA LA GELATINA CASERA
- 4 cáscaras de mandarina (de mandarinas lavadas y peladas).
- 1 litro de agua.
- 1 taza de azúcar (cantidad al gusto).
- 1 paquete de gelatina sin sabor
- Jugo de una mandarina (opcional para intensificar el sabor).
PASO A PASO PARA SU ELABORACIÓN
- Colocar las cáscaras en un recipiente con agua y llevarlo a fuego medio. Cocinar 20 minutos para que se libere el sabor de la mandarina. Después retira del fuego y deja enfriar.
- Una vez enfriado, cuela el resultado para eliminar los posibles restos y obtener el líquido con el sabor.
- Seguir agregando paulatinamente el azúcar en el agua infusionada y remover hasta que se integre bien. Para tener un sabor más intenso se puede añadir el jugo de una de las mandarinas que se hayan pelado.
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- Prepara la gelatina siguiendo las instrucciones. Comúnmente se disuelve la gelatina sin sabor dejando reposar hasta que se hidrate.
- Añadir la gelatina hidratada a la mezcla y remover hasta que este totalmente disuelta.
- Separa el contenido en moldes individuales y déjalo refrigerar al menos 50 minutos hasta que la gelatina esté firme.
- Ya podrá disfrutar de este delicioso postre el cual podrá acompañar de rodajas de mandarina o hierbabuena.
La cáscara de mandarina es rica en antioxidantes como los flavonoides, que ayudan a combatir el estrés oxidativo en las células, lo cual contribuye a la salud general y puede tener propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas.
Además, contiene aceites esenciales que se han asociado con efectos antimicrobianos, lo que puede ayudar a combatir bacterias y otros patógenos.
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